“‘Encapricharse con querer atropellar al Poder Judicial, simplemente porque falló a favor de un distrito que no es de tu color político, no es otra cosa que querer llevarse por delante los valores republicanos que ya no deberían estar en duda para nadie en Argentina. Es de una gravedad muy preocupante que un funcionario público como el presidente de la Nación amague con no acatar una sentencia judicial y luego, por encargo de su jefa política, se infle el pecho anunciando un juicio al titular de la Suprema Corte. Debería darle vergüenza al presidente, más que orgullo, esta absurda batalla que está dando en nombre de la impunidad de Cristina Fernández de Kirchner, que es quien lo manipula de acuerdo a la conveniencia de ella y de su familia. Mientras en Argentina nos tapa la inflación, nos mata la inseguridad y nos atrasa cada vez más el nivel educativo, el presidente y la vice de lo único que se preocupan es de cómo armar artilugios autoritarios para tapar y zafar de lo que se robó el kirchnerismo”.